El nuevo esquema horario nos plantea algunos desafíos: necesitamos sumar manos de voluntarios para el Apoyo durante los días de semana ya que tenemos algunos niños que requieren una atención especial, personalizada: a pesar de la edad y lo avanzados que van en su escolaridad, dos de ellos son analfabetos.
Con el dinámico entusiasmo de nuestros queridos profesores de Deportes, Jorgelina, Beto y César; y con la dulce paciencia de Elena y Lucía, vamos recorriendo estos primeros días de la actividad con los chicos.
Este espacio amplio que nos rodea, y este pequeño refugio de La Casita que nos cobija, nuevamente es el ámbito donde se construyen los vínculos que cicatrizan tantas divisiones, donde aprendemos todos a ser personas como en una familia.
La Escuela de Jardinería y los Cursos de ATB tuvieron también un auspicioso comienzo. Seguramente que este año superaremos la cantidad de alumnos del año pasado.
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